lunes, 7 de abril de 2014

Inevitable reflexión incoherente post-cumpleaños

El tiempo es un camino demasiado largo para verme aquí desde entonces, pero, imaginación por catalejo, me vi con una vida de la que, con excepción de ti, todo está por llegar. Eres mi único objetivo alcanzado y, en realidad, me alcanzaste tú.
Podría sentirme decepcionado conmigo mismo, de hecho, he pasado por ello, por no ser lo que de pequeño soñaba que hoy sería, pero al crecer he ido descubriendo que, por mucho que siempre haya sido un poco adulto, la mente de un niño, la de nadie en realidad, no está preparada para asimilar la complejidad de la vida, las circunstancias que condicionan cada paso... Podría sentirme decepcionado, sí, y sin embargo estoy orgulloso de no haberme rendido aunque cualquiera habría entendido que lo hiciera. Estoy orgulloso por seguir persiguiendo al yo que imaginaba ser algún día, aunque ese día aún esté por llegar y tarde en alcanzarlo un poco más de lo que imaginaba antes de dormir, en aquella litera de arriba al abrigo de la misteriosa luz de esa estrella de plástico fosforescente, faro de mis sueños.